Así se revaloriza tu vivienda gracias a la eficiencia energética

A la hora de adquirir una vivienda o calcular el valor de tu vivienda actual, ahora hay un factor muy interesante a tener en cuenta. Este es el de la eficiencia energética. Básicamente, consiste en medir el impacto que tiene en el gasto energético y en la sensación térmica el diseño de la vivienda. Así, un edificio eficiente permite ahorrar en energía para mantenerla fría o caliente. Por otro lado, los edificios poco óptimos implican un mayor gasto energético.

Esto significa que, a la larga, la persona debe tener en cuenta que las viviendas menos eficientes reportan un gasto paralelo.

¿Qué es la eficiencia energética?

La eficiencia energética es una forma de optimizar el uso del suministro de energía para poder ahorrar energía sin renunciar a la sensación de confort. Tienes diferentes formas de conseguir esto, pero muchas se basan en adaptar el consumo energético al uso real. Esto se puede realizar de forma sencilla apagando dispositivos cuando no los usamos, pero hay mucho más. Así mismo, hay electrodomésticos que son más eficientes que otros, dependiendo de la energía que dejen ir sin usar. Esto lo puedes evaluar según la etiqueta que posean.

Además de dichos aparatos, también es importante entender que la disposición de tu casa puede influir también. Algo tan simple como saber cuándo bajar las persianas o abrir las ventanas puede influir en la temperatura media de tu hogar o en la humedad. Es por ello por lo que los gobiernos promueven la responsabilidad en la fabricación de dispositivos, pero también las buenas conductas ciudadanas.

¿Cómo se calcula la eficiencia energética?

A priori puede parecer que se trata de un sistema complejo de medir, ya que tiene en cuenta factores que en el día a día no son determinantes, aunque sí a largo plazo. Para saber cómo estimarla, es importante acudir a normativas internacionales como la Norma ISO 50001 o la IPMVP. Además de estas normativas, también existen consejos a nivel local. Eso sí, a menudo estas se centran en recomendaciones y buenas prácticas para empresas.

En el caso de los particulares, a veces es necesario un perito independiente especializado en este ámbito. Estos profesionales se encargan de recoger información durante un periodo determinado y cruzarla para obtener información. De esta forma, obtienen información cualitativa y cuantitativa.

No solo es posible calcular y mejorar la eficiencia energética de una vivienda, sino que en el caso de uno o varios bloques también hay alternativas. Cada vez hay más comunidades de vecinos que también buscan medir y progresar en este sentido.

Beneficios de la rehabilitación energética

• Ahorro en gasto energético. Si una infraestructura hace que gastes menos luz y agua, la factura final será más barata y podrás destinar ese ahorro a otros gastos. Sin duda, el aspecto económico es muy importante, especialmente en un contexto de inestabilidad de los precios de la energía. La mejor manera de garantizar que siempre pagarás el mínimo es contando con una casa optimizada
• La reducción del impacto medioambiental. Cuanta menos energía utilicemos, menos combustibles fósiles se gastarán y, por tanto, estaremos enviando menos CO2 a la atmósfera.
• Generación de empleo sostenible.
• Una reducción de la dependencia energética del exterior.
• Reducción de la pobreza energética y el incremento de la producción y actividad económica del país, consolidando su crecimiento económico.
• Permite la incorporación de tecnologías avanzadas en las viviendas y edificios.

La rehabilitación energética de edificios aumenta su valor un 25%

Una rehabilitación energética no es un gasto sino una inversión que se autofinancia y se rentabilizará por los ahorros conseguidos y la revalorización conseguida. En el caso de las viviendas de alto standing, el porcentaje de revalorización sube un 65%, según datos de Tinsa.

Para conseguir esta revalorización hay que mejorar la calificación energética de la vivienda y esto solo es posible haciendo una rehabilitación.

Ejemplo de las cosas en donde se puede incidir para llevar a cabo esta rehabilitación es en la instalación térmica, hidráulica y eléctrica para mejorar la envolvente y la protección solar; cambiar la carpintería, el acristalamiento y, sellar las infiltraciones.

Dentro de la casa, hay una serie de cuestiones que se pueden poner en práctica. Hablamos de los recorridos y flujos del aire y la luz. A medida que avanza el día, es posible medir la trayectoria que realizan ambos elementos y cómo contribuyen a la temperatura en casa. De esta manera, es posible medir que, si una casa canaliza mejor la luz y el aire, se podrá ahorrar y utilizar una parte de la energía para calentarla o refrigerarla. Así, un simple estudio arquitectónico puede poner de relieve todo el dinero que cuesta al año una estructura ineficiente.

En lo que respecta a calentar el agua, recomendamos apostar por calderas de condensación. Estos sistemas son muy eficientes y se amortizan al poco tiempo, aunque cuenten con una inversión inicial mayor. En el baño hay diferentes dispositivos que también puedes instalar para reducir el consumo de agua. Esto también se puede aplicar a zonas comunes y de piscina de comunidades de vecinos.

 Ayudas para la rehabilitación energética de edificios

La idea es que cualquier edificio puede disfrutar de una reforma y rehabilitación a nivel energético. Así, tanto por separado como juntas, las viviendas y zonas comunes consumirán menos energía y ahorrarán dinero. Igualmente, esto convierte al edificio en una zona más sostenible, por lo que puede atraer a un perfil determinado de persona concienciada.

Hay una serie de subvenciones que se pueden recibir para acondicionar el edificio. Así, las personas irán actualizando los bloques en los que vivan sin tener que desembolsar mucho dinero. El programa Next Generation comprende una amplia variedad de sectores y tipos de subvenciones que podrás recibir aportando la documentación necesaria.